El 29 de abril de 1980, a los ochenta años, falleció en Los Ángeles el hombre que mejor supo mantener en tensión al público en una sala de cine, el director Alfred Hitchcock. De origen británico, Hitchcock dio inicio a su carrera en su país natal, donde rodaría películas tan reseñables como Treinta y nueve escalones.
Sin embargo pronto daría el salto al cine americano donde alcanzaría fama internacional. Su primera película en Estados Unidos, Rebeca, una obra maestra del suspense con personajes tan inolvidables como el ama de llaves Mrs. Danvers, obtuvo el premio Oscar a la mejor película de 1941.
Genio del cine de suspense, con fama de carácter endiablado y que gustaba de hacer pequeñas intervenciones en sus filmes, dejó Psicosis, Los pájaros o Con la muerte en los talones entre otros títulos para la historia.
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