El día 3 habían empezado los choques entre la policía y los estudiantes universitarios del campus de Nanterre. Las protestas se extendieron rápidamente por las universidades. Desde el día 8 se sumaron al conflicto los trabajadores de la industria y la movilización social se convirtió en una protesta global contra el sistema político del gaullismo.
Las huelgas se extendieron llegando a paralizar a las empresas más importantes, como Renault o SNCF. El día 15 los estudiantes tomaron uno de los principales centros culturales de París: el teatro del Odeón. Al día siguiente, después de seis horas de debate, declararon que el teatro quedaba convertido en un centro de reunión de obreros, estudiantes y artistas para la regeneración de la cultura. Desde entonces el Odeón fue uno de los centros neurálgicos de Mayo del 68.
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